En el contexto de la 105.ª Asamblea de Obispos de Bolivia, reunidos en la casa de retiros “Cardenal Clemente Maurer” de la ciudad de Cochabamba, los miembros de la Comisión Animadora de la Red Eclesial del Gran Chaco y Acuífero Guaraní (Regchag), con el acompañamiento del Consejo Episcopal Latinoamericano y Caribeño (Celam), a través del Centro de Programas y Redes de Acción Pastoral (Ceprap), llevaron a cabo la socialización del camino sinodal de la Regchag ante la Asamblea de Obispos de la Conferencia Episcopal de Bolivia (CEB).
El encuentro, que se realizó el 12 de noviembre por la mañana, tuvo el objetivo de presentar el esfuerzo y el trabajo conjunto que el Celam, a través del Ceprap, realiza con las redes territoriales. En este caso, se habló de la labor de la Regchag en la protección y gestión de la reserva más grande de agua del Chaco, que abarca territorios de Paraguay, Uruguay, Bolivia y Argentina.
Cesar Piscoya, asesor de Ceprap que se hizo presente en la reunión, compartió que, durante la sesión, los obispos de la CEB mostraron interés y preocupación por cómo articular esfuerzos conjuntos para fomentar la conciencia sobre el cuidado de la Casa Común y promover una ecología integral.
Unidos por el cuidado de la Casa Común
El diálogo abordó cómo los obispos de las regiones oriental y occidental podrían unirse para fortalecer estas iniciativas, reconociendo que la evangelización va de la mano con la promoción de la dignidad humana y una vida justa.
La defensa del agua se presentó como una preocupación por la vida y el bienestar de las comunidades que dependen de este recurso vital: “La preocupación por el agua, es una preocupación por cada uno de nosotros hermanos y hermanas que, en este tiempo y en este contexto, están necesitando que podamos no solamente cuidar y preservar el agua, sino que, a través de ella, a las comunidades, a los pueblos y a nuestros hermanos”, y ahí está el apoyo de la Iglesia para proteger el don de la creación.
Se mencionó también el trabajo de otras redes eclesiales, como la Red Eclesial Panamazónica (Repam) y la Red Eclesial Mesoamericana (Remam), que igualmente contribuyen al desarrollo de una conciencia integral y colaborativa. “Fue importante la participación de los obispos que se sumaron en esa conciencia de un trabajo que nos toca ir haciendo de manera conjunta”, remarcó Piscoya, resaltando el trabajo colaborativo y en Sinodalidad por la defensa del medio ambiente y la dignidad humana.
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