Los valores humanos y evangélicos esenciales son -a la vez- don, tarea, cruz y arte. “Don”, porque se recibe con gratuidad; “tarea”, porque exige esfuerzo; “cruz”, porque implica entrega; y “arte”, porque expresa creativamente la intimidad....
“𝙔𝙤 𝙨𝙤𝙮 𝙡𝙖 𝙫𝙞𝙙 𝙮 𝙪𝙨𝙩𝙚𝙙𝙚𝙨 𝙡𝙤𝙨 𝙨𝙖𝙧𝙢𝙞𝙚𝙣𝙩𝙤𝙨. 𝙀𝙡 𝙦𝙪𝙚 𝙥𝙚𝙧𝙢𝙖𝙣𝙚𝙘𝙚 𝙚𝙣 𝙢í 𝙮 𝙮𝙤 𝙚𝙣 é𝙡, é𝙨𝙚 𝙙𝙖 𝙢𝙪𝙘𝙝𝙤 𝙛𝙧𝙪𝙩𝙤, 𝙥𝙚𝙧𝙤 𝙨𝙞𝙣 𝙢í 𝙣𝙤 𝙥𝙪𝙚𝙙𝙚𝙣 𝙝𝙖𝙘𝙚𝙧 𝙣𝙖𝙙𝙖” (𝙅𝙣 15,5) En nuestra cultura religiosa existe la costumbre de endosar a Dios todo lo que pasa en el mundo. Por el…...
Con admiración recordamos la personalidad y las propuestas de un hermoso jardín de líderes que nos han ayudado -a lo largo de la historia- a dar pasos de humanidad....
Más allá del desahogo, todas las personas necesitamos encontrar a alguien que nos escuche y nos ayude a ver “lo mismo de otra manera”… más humana y más esperanzada. De hecho, tratamos de huir del escándalo y del chisme, donde lo personal se convierte en público...
“La Paz es la misión”, porque Jesús nos saluda, comparte, contagia… y nos envía a vivir la paz. No es la quietud de los muertos o de los miedosos, ni tampoco un sentimiento intimista que nos aísla del mundo externo, con el descompromiso por el cambio. La paz es luz…...
El miedo y la incertidumbre están respirándose en la mayoría de los pulmones, comunidades e instancias de la humanidad, ya que se ven más amenazas que esperanzas, y más oscuridad que amaneceres....
El horror de la guerra, terrorismo, sicariato, femicidio, homicidio y todo tipo de muerte, no se puede justificar con nada y para nadie. Porque la vida es el valor supremo y la muerte es el dolor mayor, que se agrava cuando se provoca y se prolonga...
Una manera de expresar nuestro humanismo es el servicio a los más cercanos, a los que más necesitan e -incluso- a los que menos “se lo merecen”. De hecho el servicio es la “actitud” existencial y son las “acciones” concretas de quien busca el bien de la/s otra/s persona/s, más…...
Además de un sentimiento y de un deseo, hemos descubierto que el amor es una “decisión” de dar la vida para que el/a otro/a tenga vida… y vida plena. O sea, no se trata -solo- de sentirse bien, sino de “hacer feliz” a quien se ama...
En el afán de mantener el “prestigio” por encima del testimonio y de buscar la “grandeza” más allá de la realidad, solemos cometer la imprudencia de “aparentar” lo que no somos...