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En Argentina se instituyó en 1970 la “Colecta Más por Menos”, organizada por la Conferencia Episcopal Argentina a través de la Comisión Episcopal de Ayuda a las Regiones Más Necesitadas. En 2022, el lema es “Un poquito de cada uno puede hacer una gran obra”, invitando a que con la colaboración que se lleve a cabo los próximos días 10 y 11 de septiembre, en parroquias, capillas y colegios, el pueblo argentino pueda descubrir que “aliviando el dolor de hoy, alimentamos la esperanza”.

Compensar la falta de equidad social

Lo que se quiere con esta colecta es ayudar a “paliar las dificultades de gran parte de la población del interior, especialmente aquella que se encuentra marginada en las zonas más pobres de Argentina”, como informan desde la web de la propia colecta. Se trata de establecer puentes “entre los que más tienen y los que tienen poco o nada”, buscando así “compensar la falta de equidad social”, a través de una colecta que es considerada como de una de las de mayor envergadura dentro de la Iglesia Católica Argentina.

Ante la profunda inequidad que se vive en Argentina, la colecta es un gesto para estrechar las distancias sociales, queriendo “brindar auxilio para que la Iglesia pueda llegar a todos con su mensaje de vida y su amor solidario. Sin excluir a nadie, esta colecta pretende ser un instrumento más para fortalecer con recursos la convocatoria a todos a asumir la Buena Noticia del Evangelio en una vida pastoral y comunitaria que ayude a formar ciudadanos responsables, honestos y justos”.

Inspirada en Adveniat y Misereor

Se trata de una colecta inspirada en Adveniat y Misereor, tradicionales colectas de la Iglesia alemana, fundadas en 1961 y 1958 respectivamente, buscando “combatir las causas de la miseria, tal como se manifiesta sobre todo en los países de Asia, África y América Latina, en forma de hambre, enfermedad, pobreza y otras formas de sufrimiento, posibilitar a los afectados una vida digna, y promover la justicia, la libertad, la reconciliación y la paz en el mundo”.

Con la Colecta Más por Menos se pretende ayudar en la promoción social y en la pastoral. Los fondos son destinados a aborígenes, asistencia y promoción, educación y formación, medios de comunicación social, microemprendimientos laborales, movilidad, salones multiuso, salud y vivienda. En el campo de la pastoral, en formación y ayuda de agentes de evangelización, construcciones y remodelaciones, funcionamiento de estructuras diocesanas y movilidad.

Salir del individualismo

Los obispos miembros de la Comisión Episcopal de Ayuda a las Iglesias más necesitadas, a través de diferentes videos, han animado al pueblo argentino a participar en la colecta de este año, a cooperar juntos, como señala Mons. José Luis Corral, obispo de Añatuya, queriendo que sea “un gesto de solidaridad, de fraternidad, donde juntos vamos formando este nosotros, que nos saca de nuestro aislamiento, individualismo, y que nos hace también encontrarnos en la solidaridad, en la comunión”.

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Recordando que se trata de la colecta número 53, Mons. Gustavo Alejandro Montini, alienta a todos a difundir esta colecta, que “tiene su historia y su tradición y ha hecho tanto bien”, llamando el obispo de Santo Tomé a participar y colaborar. Por su parte, Mons. Luis Darío Martín, habla de ella como una colecta muy querida en Argentina, pues consigue que se vaya “ayudando con un empujoncito a aquellas personas o aquellas instituciones o grupos que quieren hacer el bien a nuestra gente, y a veces se ven como imposibilitados por esas trabas de lo material que les cuesta llegar”, afirma el obispo auxiliar de Santa Rosa.

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