Con las palabras «La paz esté con todos ustedes» (Jn 20, 19), el recién elegido Papa León XIV pronunció su primer mensaje al mundo desde el balcón central de la Basílica de San Pedro. Frente a una multitud de fieles, el nuevo Sucesor de Pedro expuso un discurso lleno de esperanza, gratitud y compromiso pastoral, marcado por un llamado profundo a la paz y al diálogo.
«Queridos hermanos y hermanas, este es el primer saludo de Cristo resucitado y buen pastor que ha dado la vida por el rebaño de Dios», expresó León XIV con serenidad y firmeza.
Una paz que viene de Dios
El Pontífice, anteriormente conocido como el cardenal estadounidense Robert Francis Prevost, habló de la paz de Cristo como «una paz desarmada, desarmante y perseverante«, recordando que esta proviene de Dios . Instó para que esta paz llegue a las familias, comunidades y al corazón de cada persona, destacando que “el mal no prevalecerá, estamos todos en las manos de Dios”.
Igualmente, al dirigirse a la Iglesia de Roma y al mundo, el líder religioso animó a ser una Iglesia misionera y sinodal donde se construyan puentes de diálogo y encuentro. “Una Iglesia que camina, una Iglesia que busca siempre la paz, que busca siempre la caridad y estar cerca de quienes sufren”.
Herencia espiritual y continuidad
Haciendo memoria del Papa Francisco, León XIV agradeció su testimonio de fe y bendición a Roma y al mundo. Prometió dar continuidad a ese gesto, renovando la bendición papal con las palabras: “Dios nos quiere mucho, Dios ama a todos”.
El nuevo Papa también manifestó su agradecimiento a los cardenales que lo eligieron y se identificó como “un hijo de San Agustín”, recordando la conocida frase del santo: “Con ustedes soy cristiano, para ustedes obispo”.
Un emotivo saludo a Perú
Con una sonrisa en sus labios y con emotividad, dirigió unas palabras en español a su querida diócesis de Chiclayo, Perú, agradeciendo la fidelidad de su pueblo y su acompañamiento durante su estadía en este lugar. Reconocimiento que viene de haber servido como obispo de esta jurisdicción desde 2015 hasta 2023, donde se ganó el cariño de sus fieles por su labor pastoral y cercanía.
“Y se me permiten también una palabra, un saludo. En modo particular a mi querida diócesis de Chiclayo en el Perú, un pueblo fiel que ha acompañado a su obispo, ha compartido su fe y ha dado tanto, tanto para seguir siendo Iglesia fiel de Jesucristo”, mencionó.
Devoción mariana y bendición apostólica
Coincidiendo con la fiesta de la Virgen de Pompeya, León XIV expresó su deseo de caminar de la mano con María y animó a los presentes a unirse en oración, rezando juntos el Ave María antes de impartir la bendición apostólica «Urbi et Orbi», que concede la indulgencia plenaria a quienes la reciben en las condiciones establecidas por la Iglesia.
De esta manera, León XIV inició su pontificado el nuevo Sucesor de Pedro, con un llamado a la unidad, la paz y el compromiso misionero bajo el signo de la caridad, la oración y el encuentro.
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