De cara al proceso electoral que ya ha iniciado en Honduras con la convocatoria a elecciones en el 2025, la Iglesia católica aseguró que en el país hay «mucha desesperanza» y «negatividad», y pidió a los políticos «no jugar con la dignidad» de las personas.
Las afirmaciones fueron ofrecidas por el portavoz de la arquidiócesis de Tegucigalpa, padre Juan Ángel López Padilla, quien, en compañía del arzobispo de la capital hondureña, el español José Vicente Nácher, ofrecieron una rueda de prensa.
Llamado a una convivencia respetuosa
Durante el encuentro con los medios de comunicación, el sacerdote subrayó que es triste ver que en este país se mantiene vivo un ambiente de negativismo y división, generando con ello, que entre la misma población se hagan daño, «juzgándola por pertenecer a un partido diferente o pensar de otra manera».
López aseguró que, el éxito de un gobierno afecta a toda la ciudadanía, por lo que subrayó la importancia de que los líderes entiendan que las críticas constructivas que se hagan, no pueden interpretarse como ataques y por tanto deben recibirse de manera asertiva.
Un ejercicio sano de la política
Haciendo mención a la convocatoria del Jubileo o ‘Año Santo’, bajo el lema: “Peregrinos de la esperanza”, recordó que el Papa Francisco hace un llamado a hacer «un ejercicio sano de la política, al ejercicio sano de la manera de gobernar, eso lo necesitamos todos».
Concluyó su intervención asegurando que, «está a favor de todos, de la vida, la verdad, la justicia y la libertad, sin importar el color político o el partido. Solo así podemos construirnos como nación».
El Jubileo, una oportunidad para fortalecer la fe y la unidad
Luego asumió la vocería el arzobispo Tegucigalpa, José Vicente Nácher Tatay, quien anunció que Honduras ya dio inicio al Jubileo 2025, un evento que tiene lugar cada 25 años, a partir del 29 de diciembre y que se extenderá hasta el 06 de enero de 2026.
El prelado animó a todos los católicos y personas de buena voluntad, independiente de su credo religioso para que se sumen a esta celebración, explicando que a lo largo del año se tendrán varias iniciativas y actividades programadas para vivir este año de gracia.
“Los fieles podrán peregrinar personal o comunitariamente para acceder a los beneficios espirituales de esta convocatoria, por la que la iglesia difunde de manera generosa, la gracia y la misericordia de Dios durante todo el año”, resaltó el arzobispo.
En la tradición católica, el Jubileo es un tiempo dedicado «a consolidar la fe y la solidaridad», durante el cual la Iglesia concede indulgencias o el perdón de los pecados a todos aquellos que hagan obras de caridad y atraviesen algunas de las Puertas Santas: en San Pedro o en las otras basílicas romanas.
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