Iglesia mexicana llama a la solidaridad con las víctimas del huracán Otis

Ante la grave situación que atraviesa el estado de Guerrero tras el paso del huracán Otis, Mons. Ramón Castro, secretario general del Episcopado Mexicano, hizo un llamado a la solidaridad para que más allá de las diferencias sociales o políticas, todos los creyentes y personas de buena voluntad en el continente, ayuden desde la oración y la solidaridad material a las familias de Guerrero que sufren en este momento los efectos de los embates de la naturaleza.

Oración y acción

“Unámonos en oración por los que sufren, por los que han perdido a sus seres queridos, por los que se han quedado sin techo, pero la oración no es suficiente; invitamos a cada uno de ustedes a que en un gesto de amor hagan sus donaciones a través de la Red Nacional Cáritas, para apoyar a las víctimas de OTIS en Guerrero,” afirmó el obispo en un videomensaje que muestra la gravedad de los hechos en esta parte del país.

Para el prelado, “cada donación por pequeña que sea hará la diferencia en la vida de aquellos que están sufriendo y que por medio de Cáritas mexicana llegará a cada una de las comunidades afectadas,” consciente de que se trata de una misión que debe adelantarse persona a persona y en la cual este organismo cuenta con una gran experiencia.

Mons. Castro recordó que, en este momento de adversidad, somos Iglesia, una comunidad de fe y amor que camina en unidad de la mano de la Virgen de Guadalupe, por lo que con nuestra generosidad “podemos ser luz en medio de la tormenta, esperanza en medio de la desesperación y consuelo en medio del dolor” que viven miles de familias.

De acuerdo con las autoridades el paso del huracán Otis dejó 46 muertos, 47 desaparecidos y un sinnúmero de heridos. Una dolorosa situación ante la cual el obispo pide que “demostremos al mundo que somos una iglesia de acción, una iglesia de solidaridad, una iglesia que cuida de los más vulnerables, por lo que debemos mantenernos unidos por nuestros hermanos de Guerrero”.

Cáritas mexicana lidera entrega de ayudas

Al respecto, la invitación del obispo es a colaborar con la donación de enseres de acuerdo con la solicitud expresa de las organizaciones religiosas y civiles encargadas de los centros de acopio o haciendo uso de las cuentas bancarias dispuestas por Cáritas mexicana para recoger los recursos económicos que ayudarán a resolver diversas dificultades en la zona del desastre.

Se calcula que las pérdidas ocasionadas por el paso del huracán Otis en el estado de Guerrero, pueden llegar a los 16 mil millones de dólares, esto hablando tanto de pérdidas económicas como de pérdidas aseguradas de acuerdo con los datos de la entidad calificadora Fitch Ratings.

Otis es el huracán más fuerte que ha azotado la costa pacífica de México, tras alcanzar la categoría 5, la más alta, en menos de 12 horas.

La Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), informó que los daños materiales alcanzaron al 80% de los hoteles de la ciudad de Acapulco, 16 mil viviendas y 20 mil vehículos, por lo que las organizaciones calificadoras de riesgos explican que la cobertura de seguros por daños en México tiende a limitarse a hoteles y complejos turísticos.

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Gobierno anuncia medidas

Por su parte el gobierno mexicano anunció este 1 de noviembre, la entrega de ayudas para las reparaciones a las locaciones afectadas por el paso del huracán Otis. Sobre el tema, el presidente Andrés Manuel López Obrador, dijo que las ayudas alcanzarían los 61.313 millones de pesos mexicanos que en dólares serían unos 3.400 millones, pensando únicamente en la reparación y los apoyos sociales destinados a los habitantes del estado de Guerrero.
El Plan de recuperación propuesto por el gobierno mexicano tiene 20 puntos que incluyen la inversión de 10 mil millones de pesos en la restauración de la infraestructura pública de Acapulco, una de las ciudades más afectadas.

Sin olvidar que la mayor cantidad de recursos, es decir, unos 10.471 millones de pesos se destinará a la entrega individual de dinero en efectivo para los dueños de las viviendas afectadas que se estima, podrán recibir hasta 60 mil pesos para restaurar los daños de sus inmuebles.

También se eximirá a los dueños de predios del pago de impuestos por los inmuebles lo que le costará 9.109 millones de pesos al Estado mexicano, pero que, desde el conjunto de medidas de emergencia, busca favorecer a las familias en medio de la crisis causada por el huracán.