Monseñor Jorge Eduardo Lozano, actual secretario general del Consejo Episcopal Latinoamericano y Caribeño (Celam) y arzobispo de San Juan Cuyo (Argentina), cumple 23 años de ordenación episcopal este 25 de marzo en la Solemnidad de la Anunciación.
Cabe recordar que el 4 de enero de 2000, el Papa san Juan Pablo II hizo su nombramiento como obispo de Fornos Mayor y auxiliar de Buenos Aires. Dos meses y medio después, el 25 de marzo, en la catedral de Buenos Aires, el entonces cardenal Jorge Mario Bergoglio, arzobispo de esta jurisdicción, dirigía la ceremonia de ordenación episcopal, con monseñor Raúl Omar Rossi, obispo de San Martín y monseñor Mario José Serra, obispo auxiliar de Buenos Aires, fungiendo como co-consagrantes.
En 2005, es trasladado como obispo de Gualeguaychú, departamento fronterizo con Uruguay, donde toma posesión como cuarto obispo el 11 de marzo de 2006. Es hasta 2016 cuando el Papa Francisco lo designa como coadjutor de San Juan de Cuyo, occidente del país, hasta que el 17 de junio de 2017 se posesiona como su sexto prelado.
Su servicio a la Iglesia en América Latina
Monseñor Lozano tuvo un papel importante en la V Conferencia General del Episcopado Latinoamericano en Aparecida (Brasil) en 2007 como responsable de la Oficina de prensa de este evento.
También fue uno de los cuatro obispos argentinos que participó en el Sínodo sobre la Nueva Evangelización en Roma en Octubre 2012 y dentro del Celam fue responsable la sección Laicos constructores de la sociedad en el período 2003-2007 y de Pastoral Social del Departamento de Justicia y Solidaridad.
El 06 de noviembre de 2020 fue designado secretario general del Celam, en relevo de monseñor Juan Carlos Cárdenas, quien fue nombrado por el Papa como obispo de Pasto, al sur de Colombia.
Desde entonces ha acompañado, junto con toda la presidencia, el proceso de reestructuración y renovación del Celam como también ha liderado el proceso de apropiación del texto de reflexiones y propuestas pastorales de la Asamblea Eclesial.
Un dato curioso
Su cruz pectoral es una confección artesanal, con base en hilos y madera. Cuenta que se la regaló un hermano privado de libertad en una misión que “hicimos algunos obispos en algunos centros penitenciarios de Buenos Aires”
“Un muchacho me preguntó porqué teníamos esa cruz en el pecho. Yo le expliqué el significado y me dijo «yo para mañana te hago una cruz». Y me hizo esta cruz, con este hilo trenzado, que es un trabajo artesanal muy prolijo”, rememora.
Monseñor explica que cada vez que se pone esta cruz “la beso y en este signo también beso a quienes están privados de libertad y quienes quieren un mundo nuevo, a veces lo logran o a veces no, y es una forma de recordarlos en mi corazón”.
Síntesis biográfica
Don Lozano – padre Jorge como suele llamarlo cariñosamente su feligresía – nació en Buenos aires el 10 de febrero de 1955. Se graduó de electrotécnico en la Escuela Industrial ‘Ingeniero Otto Krause’.
Luego de estudiar un año de ingeniería, abandona y decide ingresar al seminario en Villa Devoto. Obtiene el bachillerato en teología en la Pontificia Universidad Católica Argentina. Fue el 03 de diciembre en 1982 cuando se ordena como sacerdote, de manos del entonces arzobispo de Buenos Aires, el cardenal Juan Carlos Aramburu.
Ya sacerdote ejerció como vicario parroquial en dos parroquias bonaerenses (1983-1988), fue asistente adjunto arquidiocesano para la Juventud de Acción Católica (1983-1993), vicepresidente de la Comisión Arquidiocesana de Institutos Educativos Parroquiales (1990-1992), párroco y delegado arquidiocesano para la preparación del Gran Jubileo del 2000.
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