Desde su experiencia de más de 20 años como director ejecutivo de la Oficina de Derechos Humanos del Arzobispado de Guatemala (ODHAG), Nery Rodenas ofrece un análisis de la crisis que enfrentan los defensores de derechos humanos en América Latina. Durante su participación en la Gira de Incidencia y Solidaridad, desarrollada del 20 al 24 de enero en Honduras, Rodenas señaló la necesidad de la articulación internacional para enfrentar la persecución y criminalización de líderes comunitarios.
“Hay diversas plataformas a nivel internacional interesadas en la situación de defensores y defensoras de derechos humanos. Hay plataformas que se fundamentan en la fe, como la nuestra, pero también hay otro tipo de plataformas en las cuales se trata de trabajar con aquellas personas que han sido criminalizadas”, explica Rodenas, a tiempo que señala que todas buscan visibilizar la grave situación en América Latina, donde los defensores de derechos humanos son criminalizados y perseguidos por liderar comunidades en defensa de sus derechos.
Bajo el lema “Justicia para Juan y cese a la conflictividad agraria y socioambiental”, la gira congregó en Tegucigalpa a delegados de al menos 15 organizaciones civiles y eclesiásticas, incluyendo la Plataforma Internacional contra la Impunidad, Heks Eper, Peace Watch, Protection International, el Comité Municipal de Defensa de los Bienes Comunes y Públicos de Tocoa, la Diócesis de Trujillo y la campaña “La vida pende de un hilo”. Juntos, buscan respaldar a las comunidades que luchan por el acceso a la tierra, la justicia y la defensa de los bienes comunes.
Visibilización y Prevención
Rodenas, que es también vocero de la campaña “La vida pende de un hilo”, resalta que las plataformas internacionales buscan articular esfuerzos y desarrollar campañas que destaquen las realidades que enfrentan los defensores de derechos humanos. Entre estas iniciativas, la campaña “La vida pende de un hilo” tuvo un impacto significativo, siendo incluso presentada en el Vaticano.
La campaña “La vida pende de un hilo” comenzó con el caso emblemático de Juan Antonio López, defensor del río Guapinol en Honduras. Para Rodenas, poder articularse como instituciones defensoras de derechos humanos y ambientales “da más fortaleza como organizaciones para poder cumplir mejor nuestros objetivos”.
Como vocero, Rodenas asegura que “otro tema importante tiene que ver con la visibilización de aquellas personas, líderes comunitarios y comunidades que han sido afectadas por la persecución”, para prevenir nuevos hechos de violencia contra quienes defienden los derechos humanos.
Acompañamiento de la Iglesia Católica en Guatemala
Nery Rodenas remarcó la misión de la Iglesia Católica en el acompañamiento de comunidades vulnerables, especialmente en contextos de persecución: “La Iglesia Católica en Guatemala ha tenido mucha experiencia de acompañar a las comunidades y conocer aquellos casos que tienen que ver con la criminalización de los defensores de derechos humanos. La Oficina de Derechos Humanos del Arzobispado de Guatemala cumple 35 años de trabajo, se inicia en un tema de un conflicto armado interno y había una persecución en contra de miembros de la sociedad civil y sectores que estaban en la defensa de los derechos humanos”.
“Hay problemas en torno a la defensa de territorios, hay problemas de contaminación por la presencia de industrias extractivas de metales y, en ese sentido, pues muchos de estos sectores en donde hay conflicto, se han abocado a la Iglesia Católica, en algunos momentos para poder hacer una mediación frente a estas conflictivas sociales, y en otros aspectos en el acompañamiento a las comunidades que han sido afectadas”.
Según Rodenas, muchos de los líderes enfrentan la criminalización y la violencia por parte de sectores poderosos, a menudo con el respaldo de instituciones estatales como el Ministerio Público: “Necesitan de entidades como la Iglesia Católica para darles un sentido de protección, sobre todo, para buscar una aplicación de justicia equilibrada y objetiva”.
Justicia y protección para los defensores
Rodenas manifiesta que compartir experiencias entre plataformas y organizaciones, y el acompañamiento en el terreno permiten visibilizar a los responsables de la violencia: “Esperamos que quienes han sido los victimarios de estas comunidades, quienes han perseguido, quienes han ejecutado a los líderes, lo piensen dos veces, porque además de que puede haber una consecuencia propia judicial, en la cual el Estado tiene que acompañar y deducir la responsabilidad, también se va a visibilizar a quiénes van a ser los responsables y se esperaría que se puedan deducir responsabilidades”, aseguró.
Rodenas también señaló la necesidad de involucrar a las autoridades estatales en la deducción de responsabilidades y de poner fin a la impunidad que perpetúa la violencia en comunidades sumidas en la pobreza.
Lo que se busca es que el mundo conozca las problemáticas de estas comunidades y que los casos no quedan en el olvido. La comunidad internacional está atenta, y eso puede generar un cambio para garantizar la justicia y proteger la dignidad de estas personas como seres humanos.
La vida pende de un hilo
En el marco de la Gira, se resaltó la campaña “La vida pende de un hilo”, lanzada el pasado 10 de diciembre en el Día Internacional de los Derechos Humanos. Con el lema “Tejiendo futuro, protegiendo vidas”, esta iniciativa tiene el objetivo de buscar justicia y garantía de derechos frente a las graves violaciones que afectan a las comunidades en América Latina.
La campaña, inspirada en la iniciativa brasileña “A vida por um fio”, tiene como objetivos principales tejer una respuesta solidaria de “acuerpamiento” a los defensores de derechos humanos; visibilizar casos emblemáticos que evidencien el impacto social de su labor; fomentar la formación y el intercambio de buenas prácticas entre comunidades y líderes sociales; impulsar acciones de incidencia internacional para exigir políticas humanas e integrales.
El caso de Juan Antonio López, defensor del río Guapinol y del Parque Nacional Botaderos, asesinado el 14 de septiembre, fue señalado como un emblema de la lucha por los derechos humanos en Honduras. Este asesinato refleja los múltiples riesgos que enfrentan los defensores de derechos humanos, pero también hace ver la urgencia de articular esfuerzos internacionales para garantizar justicia y evitar nuevas tragedias.
Le puede interesar: México: Pastoral de Movilidad Humana exhorta a redoblar esfuerzos por los migrantes en la frontera
Suscríbete gratis por a nuestro canal de Whatsapp https://bit.ly/4hbWWN0
Participa en los cursos y diplomados del Centro de Formación Cebitepal https://bit.ly/cebitepal_24
Post a comment