Con ocasión de la 116.ª Asamblea de la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB), los obispos del país hicieron público su Mensaje al Pueblo de Dios titulado “La Iglesia en Bolivia: signo de libertad y esperanza”, una reflexión sobre la situación del país y una exhortación al diálogo, la unidad y la esperanza.
Signos de esperanza
La lectura del mensaje estuvo a cargo del secretario general de la CEB, monseñor Giovani Arana, y fue seguida por una rueda de preguntas respondida por el presidente de la CEB, monseñor Aurelio Pesoa Ribera OFM.
El mensaje inicia con el saludo pascual: “Cristo ha resucitado, ¡Aleluya!”, señalando la fuerza de la fe cristiana en tiempos de incertidumbre: “Nos hemos conmovido por la presencia masiva del pueblo de Dios en las celebraciones de Semana Santa… signos de fe y de fortaleza frente a los desafíos de la vida actual”, afirmó Mons. Arana al dar lectura al documento.
Los obispos destacaron también su adhesión a las celebraciones por el bicentenario de Bolivia, subrayando el compromiso histórico de la Iglesia con la evangelización, la defensa de los derechos humanos y el servicio a los más necesitados: “Renovamos el compromiso… en el servicio social a los más pobres, en la defensa de los derechos humanos, de la mujer y de nuestros hermanos indígenas”, se lee en el mensaje.
Crítica a la situación del país
No obstante, el texto denuncia con firmeza la crisis estructural que enfrenta Bolivia, señalando signos alarmantes de descomposición institucional, social y económica: “Constatamos que vivimos en una Bolivia destrozada en su identidad cultural y social”, afirman los obispos. Denuncian además que “se alienta la institucionalización de la mentira y el engaño imperando la demagogia que mata la democracia”.
Sobre la economía, se señala el deterioro progresivo: “El modelo económico estatal monopolista destruye sistemáticamente la economía y la propiedad privada”, lo que ha conllevado, según los obispos: al empobrecimiento del país, a la fuga de capital humano y al colapso de sectores clave como hidrocarburos y exportaciones.
A pesar del panorama crítico, la CEB hizo una exhortación a la unidad y a la reconstrucción del país desde la fe y el compromiso ciudadano: “Ser ‘Peregrinos de esperanza’ requiere asumir el imperativo de un encuentro y un sincero diálogo para construir en consenso un pacto de unidad”. En este marco, consideran las elecciones presidenciales como una oportunidad para encauzar el rumbo del país, y incitan al pueblo a ejercer el voto de manera libre, responsable y sin presiones antidemocráticas.
Amnistía jubilar
Un punto destacado fue la propuesta de una amnistía jubilar: “Reafirmamos la fuerza de la esperanza proponiendo una amnistía que abra las puertas a los que perdieron su libertad”.
“¡No nos cansemos de creer que una Bolivia mejor es posible!”, concluyen los obispos, confiando en la fuerza transformadora de la fe y el compromiso de todos los bolivianos: “Dios acompaña nuestros gozos y tristezas: nuestro Señor Jesucristo resucitado nos dice ‘¡no tengan miedo… yo he vencido al mundo!’ (Jn. 16,33)”.
Mons. Pesoa: “Nos preocupa la situación del pueblo”
Tras la lectura del mensaje, monseñor Aurelio Pesoa respondió preguntas de los periodistas presentes, abordando diversos temas de la coyuntura nacional con claridad y preocupación pastoral.
Consultado sobre la situación económica, Mons. Pesoa expresó que: “Seguramente muchos en nuestro país no estarán de acuerdo con lo que decimos los obispos, pero somos parte de este país y como pastores no estamos ausentes de la problemática social, política y religiosa que vivimos”, y añadió: “Basta mencionar a cuánto ha subido el kilo de carne. Dentro de poco… un lujo va a ser comer carne… o vamos a tener que disminuir el consumo a una vez al mes… entre todos no se trata solo de criticar, sino también de recoger el sentir de ese pueblo al que tenemos que pastorear”.
Sobre la justicia, se refirió al caso de la jueza Moreno y del exmandatario Evo Morales: “La justicia está politizada… y eso no es de hoy ni de ayer, sino desde hace un buen tiempo. El eslogan ‘todos somos iguales ante la justicia’ es solo eso, un eslogan”, manifestó. También se refirió a las elecciones de 2025, insistiendo en el llamado a la unidad: “Sea de la izquierda o de la derecha, se deben unir. Si vamos todos dispersos, los perdedores seremos todos”.
Sobre el cónclave en Roma y la elección del nuevo Papa
Acerca de la elección del próximo Papa, la autoridad eclesial explicó: “Hemos pedido oración para que los cardenales electores abran sus mentes y sus corazones y el Espíritu Santo les inspire en la elección del nuevo pastor”.
Y aclaró que desde Bolivia no se cuenta con un cardenal elector, debido a que el cardenal Toribio Ticona tiene más de 80 años y no participa del Cónclave.
El mensaje de los obispos y las respuestas de su presidente reflejan una Iglesia entregada a la realidad nacional. La Conferencia Episcopal Boliviana alza su voz para denunciar, proponer y acompañar, siendo signo de libertad y esperanza para un pueblo que quiere justicia, verdad y reconciliación.
“Como Iglesia Boliviana en este tiempo pascual nos adherimos a la oración universal por el nuevo Papa. En las memorias centenarias de María como ‘Reina de Bolivia’ y de la consagración al Sagrado Corazón de Jesús, oramos para que vengan días mejores para Bolivia”, concluye el Mensaje al Pueblo de Dios.
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