Ve luz la Carta al Pueblo de Dios a pocos días de culminar la primera etapa de de la XVI Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos. Se trata de un texto con las claves más importantes vividas durante estas cuatro semanas de trabajo, suscrito por el Papa y los padres y madres sinodales.
Un importante número de hombres y mujeres “no obispos” ha participado codo a codo con los prelados y el Papa Francisco –en una experiencia sin precedentes – “en virtud de su bautismo, a sentarse en la misma mesa para formar parte no solo de las discusiones, sino también de las votaciones de esta Asamblea”.
Por eso, “juntos, en la complementariedad de nuestras vocaciones, de nuestros carismas y de nuestros ministerios, hemos escuchado intensamente la Palabra de Dios y la experiencia de los demás”.
“Hemos sido sostenidos por vuestras oraciones, llevando con nosotros vuestras expectativas, vuestras preguntas y también vuestros miedos”, se lee.
Conversión pastoral y misionera
En el inicio de la misiva, hicieron un recuento de esta primera etapa, desde el retiro espiritual, la vigilia ecuménica, lanzamiento de Laudate deum como la participación de delegados fraternos de otras Iglesias, tradiciones (como la oriental) y comunidades eclesiales, lo que “ha enriquecido profundamente nuestros debates”.
Sobre todo se ha destacado que este Sínodo se realizado en “un contexto de un mundo en crisis, cuyas heridas y escandalosas desigualdades han resonado dolorosamente en nuestros corazones y han dado a nuestros trabajos una gravedad peculiar, más aún cuando algunos de nosotros venimos de países en los que la guerra se intensifica”.
“Hemos rezado por las víctimas de la violencia homicida, sin olvidar a todos a los que la miseria y la corrupción les han arrojado a los peligrosos caminos de la emigración. Hemos garantizado nuestra solidaridad y nuestro compromiso al lado de las mujeres y de los hombres que en cualquier lugar del mundo actúan como artesanos de justicia y de paz”, han dicho.
Han destacado que en el desarrollo de los trabajos ha resonado “el apremiante llamamiento a la conversión pastoral y misionera. Porque la vocación de la Iglesia es anunciar el Evangelio no concentrándose en sí misma, sino poniéndose al servicio del amor infinito con el que Dios ama el mundo”.
La respuesta es el amor
Ante la pregunta de qué esperan de la Iglesia con ocasión de este sínodo, han mencionado que “algunas personas sin hogar que viven en los alrededores de la Plaza de San Pedro respondieron: “¡Amor!”.
Por eso, este amor debe “seguir siendo siempre el corazón ardiente de la Iglesia, amor trinitario y eucarístico, como recordó el Papa, evocando el 15 de octubre, en la mitad del camino de nuestra asamblea, el mensaje de Santa Teresa del Niño Jesús”.
“Es la confianza lo que nos da la audacia y la libertad interior que hemos experimentado, sin dudar en expresar nuestras convergencias y nuestras diferencias, nuestros deseos y nuestras preguntas, libremente y humildemente”, añadieron.
Sobre lo que viene para 2024 durante “los meses que nos separan de la segunda sesión, en octubre de 2024” han señalado que cada uno está llamado “participar concretamente en el dinamismo de la comunión misionera indicada en la palabra sínodo”, aclarando que “no se trata de una ideología, sino de una experiencia arraigada en la Tradición Apostólica”.
Por ahora, los desafíos son múltiples y las preguntas numerosas, sobre esto “la relación de síntesis de la primera sesión aclarará los puntos de acuerdo alcanzados, evidenciará las cuestiones abiertas e indicará cómo continuar el trabajo”.
Salir a la escucha
El Sínodo solo avanzará con la escucha. “Para progresar en su discernimiento, la Iglesia necesita absolutamente escuchar a todos, comenzando por los más pobres”, lo que implica “un camino de conversión, que es también un camino de alabanza”.
Precisaron que “se trata de escuchar a aquellos que no tienen derecho a la palabra en la sociedad o que se sienten excluidos, también de la Iglesia”.
En primer lugar, han invitado a “escuchar a las personas víctimas del racismo en todas sus formas, en particular en algunas regiones de los pueblos indígenas cuyas culturas han sido humilladas”.
También hay que “escuchar a los laicos, a las mujeres y a los hombres, todos llamados a la santidad en virtud de su vocación bautismal: el testimonio de los catequistas, que en muchas situaciones son los primeros en anunciar el Evangelio; la sencillez y la vivacidad de los niños, el entusiasmo de los jóvenes, sus preguntas y sus peticiones; los sueños de los ancianos, su sabiduría y su memoria”.
Por supuesto, la Iglesia necesita “escuchar a las familias, sus preocupaciones educativas, el testimonio cristiano que ofrecen en el mundo de hoy. Necesita acoger las voces de aquellos que desean ser involucrados en ministerios laicales o en organismos participativos de discernimiento y de decisión”.
Hicieron un llamado especial a “recoger todavía más las palabras y la experiencia de los ministros ordenados: los sacerdotes, primeros colaboradores de los obispos, cuyo ministerio sacramental es indispensable en la vida de todo el cuerpo; los diáconos, que a través de su ministerio representan la preocupación de toda la Iglesia por el servicio a los más vulnerables. Debe también dejarse interpelar por la voz profética de la vida consagrada, centinela vigilante de las llamadas del Espíritu”.
Esta escucha, además de los ya convencidos, requiere salir al encuentro de quienes no comparten nuestra fe, pero que “buscan la verdad, y en los que está presente y activo el Espíritu, Él que ofrece a todos la posibilidad de que, en la forma de sólo Dios conocida, se asocien a este misterio pascual”.
En definitiva, “no debemos tener miedo de responder a esta llamada. La Virgen María, primera en el camino, nos acompaña en nuestro peregrinaje”, porque “Ella nos muestra a su Hijo y nos invita a la confianza. ¡Es Él, Jesús, nuestra única esperanza!”.
Descargue la CARTA AL PUEBLO DE DIOS
ES - Lettera al Popolo di DioLe puede interesar: Voces sinodales desde el aula Pablo VI: Un proceso de continuidad gracias al Papa Francisco
Recibe gratis por WhatsApp y Telegram las noticias de la Iglesia latinoamericana y caribeña https://bit.ly/3HcXLDU
Sigue toda la información sobre el Sínodo 2021-2024 aquí https://bit.ly/3RguCLO
Descarga la investigación “La misión de la Iglesia en los países de América Latina” https://bit.ly/3FLq8ct
Descarga el Documento de reflexiones de la Asamblea Eclesial https://bit.ly/3QXoffM
Post a comment