Ha comenzado el Tiempo de la creación, una celebración ecuménica anual de oración y acción por la casa común, que arrancó este 1º de septiembre con la Jornada Mundial de oración por el cuidado de la creación y que finaliza el 4 octubre con la fiesta de San Francisco de Asís, patrono de la ecología, y el comienzo de la primera etapa del Sínodo 2021-2024.
Bajo el lema «Que la justicia y la paz fluyan», el Santo Padre ha recordado en su mensaje por la Jornada mundial de oración que “hoy no están en armonía, no laten juntos en la justicia y en la paz. A muchos se les impide beber en este río vigoroso. Escuchemos entonces la llamada a estar al lado de las víctimas de la injusticia ambiental y climática, y a poner fin a esta insensata guerra contra la creación”.
1) El agua como sujeto de derechos
El Sumo Pontífice señaló que “el consumismo rapaz, alimentado por corazones egoístas, está perturbando el ciclo del agua en el planeta”. Ha mencionado que “combustibles fósiles y la tala de los bosques están produciendo un aumento de las temperaturas y provocando graves sequías”.
Lamentó que “las horribles carestías de agua afligen cada vez más a nuestras casas, desde las pequeñas comunidades rurales hasta las grandes metrópolis”.
En esta “guerra contra la creación” muchos de los ríos se están secando sobre todo el instinto depredador de las industrias está “consumiendo y contaminando nuestras fuentes de agua potable con prácticas extremas como la fracturación hidráulica, para la extracción de petróleo y gas, los proyectos de mega-extracción descontrolada y la cría intensiva de animales”.
La ‘Hermana agua’, como la llama san Francisco, “es saqueada y transformada en mercancía que se regula por las leyes del mercado”. Un llamado a la reflexión para reconocer este elemento como sujeto de derechos.
2) Pecados ecológicos
Francisco llama a arrepentirse de los pecados ecológicos como “advierte mi hermano, el Patriarca Ecuménico Bartolomeo. Estos pecados dañan el mundo natural y también a nuestros hermanos y a nuestras hermanas”.
Pecado que se cohete a partir de “nuestros estilos de vida”, por eso, “adoptemos estilos de vida que impliquen menos desperdicio y menos consumo innecesarios, sobre todo allí donde los procesos de producción son tóxicos e insostenibles”.
“Tratemos de estar lo más atentos posible a nuestros hábitos y decisiones económicas, de modo que todos puedan estar mejor: nuestros semejantes, donde quiera que se encuentren, y también los hijos de nuestros hijos”, añadió.
3) Transición energética
Hay una urgencia: “debemos transformar las políticas públicas que gobiernan nuestras sociedades y modelan la vida de los jóvenes de hoy de mañana”, dijo el Papa. En especial, de aquellas que generan inequidad.
Echando mano de Laudato Si’, recordó que “es obvio que las naciones más ricas han acumulado una deuda ecológica”, por eso, ha pedido a los líderes mundiales que estarán presentes en la cumbre COP28, programada en Dubái del 30 de noviembre al 12 de diciembre de este año, “deben escuchar la ciencia e iniciar una transición rápida y equitativa para poner fin a la era de los combustibles fósiles”.
Según los compromisos del Acuerdo de París para “frenar el riesgo de calentamiento global, es una contradicción consentir la continua explotación y expansión de las infraestructuras para los combustibles fósiles”.
“Levantamos la voz para detener esta injusticia hacia los pobres y hacia nuestros hijos, que sufrirán las peores consecuencias del cambio climático. Hago un llamado a todas las personas de buena voluntad para que actúen en base a estas orientaciones sobre la sociedad y la naturaleza”, expresó.
4) El río de la sinodalidad
Con el cierre del Tiempo de la creación, comenzará el Sínodo de la sinodalidad. El Santo Padre ha señalado que “como los ríos que se alimentan de miles de minúsculos arroyos y torrentes más grandes, el proceso sinodal iniciado en octubre de 2021 invita a todos los componentes, en su dimensión personal y comunitaria, a converger en un río majestuoso de reflexión y renovación”.
“Todo el Pueblo de Dios es acogido en un apasionante camino de dialogo y conversión sinodal”, explicó, mientras que “como cuenca fluvial” ha recordado que “la Iglesia es una comunión de innumerables Iglesias locales, comunidades religiosas y asociaciones que se alimentan de la misma agua”.
“Cada manantial añade su contribución única e insustituible, para que todas confluyan en el vasto océano del amor misericordioso de Dios. Como un río es fuente de vida para el ambiente que lo circunda, así nuestra Iglesia sinodal debe ser fuente de vida para la casa común y para todos aquellos que la habitan”, apostilló.
El Papa guarda en su corazón muchas esperanzas, puesto que “una Iglesia sinodal debe dar vida sembrando justicia y paz en cualquier lugar a donde llegue”.
Le puede interesar: Septiembre, el Mes de la Biblia y la Iglesia de Honduras ha preparado un itinerario en “cinco pasos”
Recibe gratis por WhatsApp y Telegram las noticias de la Iglesia latinoamericana y caribeña https://bit.ly/3HcXLDU
Sigue toda la información sobre la «Fase continental» del Sínodo aquí https://bit.ly/3RguCLO
Descarga la investigación “Nuevos escenarios y subjetividades juveniles en América Latina”
https://bit.ly/45qB6yS
Descarga el Documento de reflexiones de la Asamblea Eclesial https://bit.ly/3QXoffM
Post a comment