Frutos del Sínodo: Un antes y un después de la Amazonía (y más allá)

Una nueva entrega de la serie Frutos del Sínodo Amazónico presenta el camino del discernimiento comunitario en los procesos y acontecimientos sinodales a partir de la escucha recíproca, diálogo sincero para el bien común del pueblo de Dios como aporte de la Amazonía a la Iglesia Universal.

Mauricio López, director del Centro de Programas y Redes de acción pastoral del Consejo Episcopal Latinoamericano y Caribeño (Celam), explica que Sínodo amazónico ha marcado “un antes y un después en la historia de nuestra Iglesia”.

Asegura que se dio una escucha al pueblo de Dios que “se ha tornado irreversible. Esa participación amplia de los distintos carismas de la Iglesia y de las márgenes ha irrumpido como sujeto eclesiológico para ayudar a toda la Iglesia”.

Para López “los cuatro sueños del Papa Francisco: social, cultural, eclesial y ecológico han ayudado a la reforma de la Iglesia en distintos ámbitos más allá de la Amazonía. Es un proceso todavía en camino que ha ayudado al Celam , por ejemplo, a reconfigurarse, replantear su pastoral en proceso de largo plazo”.

El valor de la escucha

Birgit Weiler, religiosa y misionera en Perú y del Equipo de reflexión teológica-pastoral del Celam, destaca los aportes del camino sinodal amazónico al actual Sínodo de la sinodalidad sobre todo “a la importancia que ahora le damos a la escucha como actitud y práctica espiritual”.

El Sínodo amazónico –apunta la hermana Weiler – contribuyó para que la escucha se convierta en elemento indispensable para el discernimiento comunitario para acoger juntos la voluntad de Dios para la vida y la misión de la Iglesia en el contexto actual.

“También agudizó mucho nuestra conciencia de que escuchar el clamor de los pobres y de la tierra nos invita a atender estos clamores con un compromiso integral”, añadió.