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Facilitador explica la metodología de la Conversación Espiritual utilizada durante la Asamblea Regional del Cono Sur

La Asamblea Regional del Cono Sur, que se celebra del 6 al 10 de marzo en Brasilia, cuenta con la participación de unos 186 representantes de la Iglesia Católica de Argentina, Chile, Paraguay, Uruguay y Brasil. La iniciativa forma parte de la serie de cuatro encuentros promovidos por el Consejo Episcopal Latinoamericano y del Caribe (Celam) y tiene como objetivo profundizar el documento para la Etapa Continental del Sínodo 2021-2024, convocado por el Papa Francisco, cuyo tema es «Por una Iglesia sinodal: comunión, participación y misión».

 

Metodología de la «Conversación Espiritual»

Representantes de diferentes países, entre ellos obispos, sacerdotes, religiosos y agentes de pastoral, seguirán desde este lunes la metodología de la «Conversación Espiritual», una herramienta de discernimiento comunitario, basada en la escucha activa y receptiva con un enfoque en compartir lo que toca más profundamente a los participantes. Los facilitadores del método son los padres Miguel Martins Filho, jesuita y actual director del Centro Cultural de Brasilia (CCB), y el también jesuita Óscar Martín.

En una entrevista concedida al sitio web de la CNBB, el padre Miguel Martins Filho explicó que el método de la conversación espiritual se ha experimentado en el Caribe, Ecuador, México y ahora se aplicará en la Asamblea del Cono Sur. De forma didáctica, explicó que la práctica es utilizada desde hace tiempo por la Iglesia y que ha ayudado mucho en este proceso del Sínodo. «No se trata de simples discusiones de ideas, sino de compartir desde la propia experiencia espiritual la oración sobre el tema del Sínodo«, dijo.

A partir de la formación de grupos llamados «comunidades de discernimiento«, se compartirá y se hará una lectura orante del material elaborado para las etapas anteriores del Sínodo. Después de cada lectura orante, se hace una oración personal y luego se consulta a los grupos. «Es un compartir espiritual, es decir, compartir las emociones, los sentimientos experimentados a partir de su oración personal», explicó el Padre Miguel.

 

No se trata de ideas, sino de sentimientos

El Padre Miguel señaló que la conversación tiene tres rondas y que el proceso dura aproximadamente una hora y media. En la primera ronda, por ejemplo, dice que todos hablan y todos escuchan. La idea es que cada miembro hable sobre los sentimientos experimentados durante el momento de oración personal. «No se trata de ideas sobre el tema, sino de sentimientos«, añade.

Luego, en la segunda ronda, el grupo se detendrá un momento para tomar nota de lo que ha escuchado y después compartirá sus impresiones. «El aspecto más importante del método es la escucha activa y eficaz«, explica el Padre Miguel. En el tercer momento, tendrá lugar un diálogo espiritual en el que se identificarán las preguntas más urgentes.

«Hay tres rondas en las que profundizamos en lo que hemos rezado. Lo más interesante del método es que no se queda sólo en ideas, ni en una discusión de orientaciones y propuestas; lo importante es estar en un movimiento de escucha – escucha del Espíritu. Lo importante es estar en un movimiento de escucha – escuchando al Espíritu. Y ahí ejercitaremos la capacidad de leer las señales que la realidad nos va trayendo, dados los diferentes contextos y experiencias personales de cada miembro», concluyó.

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La metodología de conversación espiritual continuará, siempre en tres rondas, hasta el último día del encuentro, el próximo viernes 10. Se calcula que participarán entre 15 y 20 grupos.

 

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