En un constante ejercicio de acompañamiento y solidaridad, Cáritas Cuba celebró sus 33 años de servicio este 25 de febrero. Recordando la cita bíblica «Yo estoy entre vosotros como el que sirve» (Lucas 22:27), la organización ha tejido un legado de cercanía y compromiso con el prójimo, enfrentando desafíos y llevando esperanza a aquellos que más la necesitan.
Compromiso integral
Durante el último año, Cáritas Cuba ha extendido su mano amiga a cerca de 68 mil personas a través de diversas iniciativas que abarcan desde programas de asistencia y formación hasta la respuesta inmediata ante desastres naturales. Este compromiso integral refleja la misión de la organización de aliviar las cargas de vida de aquellos que sufren en la sociedad cubana.
El Programa de Personas Mayores (PPM) se erige como un pilar fundamental en la labor de Cáritas Cuba. En un contexto demográfico en el que la vejez se presenta como un desafío creciente, el programa brinda atención, cuidados, capacitaciones para emprendimientos productivos, entre otros servicios, contribuyendo así al bienestar integral de los ancianos en situación económica y familiar desfavorable.
Testimonios e impacto
Testimonios de quienes forman parte activa de Cáritas Cuba ofrecen una visión más profunda de su impacto:
Maribel Sánchez, directora diocesana en Guantánamo-Baracoa, comparte: «Ser testigos y mensajeros de ese amor es un compromiso grande que nos sobrepasa e interpela pero al mismo tiempo nos enriquece”.
Martha Stay, voluntaria y beneficiaria del PPM, destaca: «Como voluntaria me siento comprometida y preparada para el acompañamiento ante cualquier situación en la comunidad, además de descubrir las necesidades de las personas y las potencialidades para seguir desarrollando nuestra misión con amor, comprensión, respeto, tolerancia y bondad».
Roberto Alfonso, parte del equipo de comunicación, enfatiza: «Cáritas Cuba es ver más allá de la realidad cotidiana de la gran mayoría. Ha sido como un descubrimiento: el hallazgo de situaciones muy duras que muchas veces ignoramos y, al mismo tiempo, la certeza de que, por obra de Dios, existe una columna humana que sostiene la mano de quienes más lo necesitan”.
Ángel Miguel Gutiérrez, director de Cáritas Habana, define a Cáritas como «Hogar, Servicio, Ayuda, Amor, Sacrificio, Superación personal y profesional, Gratitud, Organización, Salvar vidas, Promover vidas, Cambiar vidas”.
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Diversidad y proyección a futuro
Con siete mujeres de once directores diocesanos, Cáritas Cuba refleja una diversidad que enriquece su labor. La visión de Ana Isabel Palenque, directora nacional, subraya que “Cáritas es una gran familia de la Iglesia con la vocación de servir a los más necesitados, ofreciéndoles desde la fe, la caridad y la esperanza, promocionándolos como personas dignas, amadas por Dios”.
En este aniversario número 33, Cáritas Cuba se proyecta hacia el futuro con la esperanza de despertar más “gestos de comunión, compromiso y servicio” en la sociedad cubana. Que la labor de esta institución siga siendo una fuente de luz y apoyo para aquellos que enfrentan desafíos, demostrando que el compromiso y la solidaridad son pilares indestructibles en la construcción de un mundo más justo y humano.
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